Día de los Derechos Humanos, Entrevista a Diamantina López

Asamblea de la RED, Patricio Cabezas, Diamantina López y Pablo Fernandez

Desde Nicaragua - Nicaraguita, Diamantina López. (entrevista publicada en La Carta del CEAAL )

“…despertar en la población la conciencia y el sentido de ser sujeta/os de derechos, personas protagonistas de derechos y deberes, preparados y preparadas para la lucha por sus reivindicaciones, para la defensa y establecimiento de sus derechos en lo individual y social”.
Diamantina López, Nicaragua


La Carta: 1. ¿Cómo y por qué se vinculó usted con la Educación Popular?

DL: En el Gobierno Revolucionario en la década de los 80, con el FSLN, laborando en el Ministerio de Educación, en el colectivo de trabajo con Adolfo López, Josefa Urcuyo, Lidia Turner, Justo Chávez y Raúl Leis, cuyo encargo era la definición de los Fines, Objetivos y Principios de la Nueva Educación, paralelamente se preparaba la Gran Cruzada Nacional de Alfabetización de la que estuve sumamente atenta por el acontecimiento que se proyectaba, cuya concepción y ejecución se basó en la Educación Popular.

Además, al visitar a cinco de mis ocho hijos que estaban alfabetizando, al preguntarles, como madre, ¿qué hacían?, ¿cómo lo hacían? etc., me fui dando cuenta por sus mismas prácticas, de la acción positiva de la pedagogía de la Educación Popular, asimismo, por los resultados obtenidos en Nicaragua. En éste período, la Educación Popular me dejó un sello pedagógico.

A partir de 1990, con el cambio de Gobierno, se funda el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), me inicio como Directora de Educación para popularizar los Derechos Humanos y empoderar a la población, a los sectores populares, para su defensa y protección de sus derechos.

La Carta: 2. ¿Cuál es el papel de la Educación Popular en su país y en América Latina?

DL: En Nicaragua, la Educación Popular ha jugado un papel fundamental para la promoción y la educación (capacitación) en Derechos Humanos. Nos hemos apropiado y fundamentado en la concepción para el desarrollo de un pensamiento crítico y transformador de valores, propiciadora del cambio de actitudes, despertar en la población la conciencia y el sentido de ser sujeta/os de derechos, personas protagonistas de derechos y deberes, preparados y preparadas para la lucha por sus reivindicaciones, para la defensa y establecimiento de sus derechos en lo individual y social.

El Consejo de Educación de Adultos-CEAAL ha jugado un papel protagónico en la aplicación, difusión e implementación de la Educación Popular en América Latina y ha cohesionado y articulando a las organizaciones que impulsan procesos de Educación Popular en diversas temáticas. Sin Educación Popular no hay transformación.

La Carta: 3. ¿Puede compartir brevemente una experiencia o testimonio de empoderamiento o transformación que haya vivido o conocido?

DL: Todo el proceso de estructuración de la estrategia educativa del CENIDH elaborada en conjunto con algunos miembros y miembras de los sectores populares, es difícil plasmarla en estas líneas, pero expondré creo, a mi juicio, lo mas relevante. Con el principio de que un organismo, una ONG sin trabajo de base, sin trabajo con sectores populares, es como cualquier programa asistencial de oferta y demanda. El trabajo con la población, con los sectores populares propician una relación de doble vía de enseñanza-aprendizaje-enseñanza, necesarios para el desarrollo y la apropiación de un movimiento social, que poco a poco lleva al cambio profundo individual, como organismo, comunitario, social, también para nuestro país y América Latina.

- Con la concepción de Educación Popular, desde el punto de vista organizativo, conformamos la Red de Promotores-as populares de Derechos Humanos “Padre Cesar Jerez” en un proceso de desarrollo organizativo, quienes se en-red-arían y conectarían hasta formar redes municipales, departamentales y nacional; sin ser estructuralmente parte del CENIDH, desarrollando el voluntariado, y el trabajo colectivo en sus respectivos territorios, se han ganado el respeto de las autoridades locales, por el trabajo comunitario ejecutado.

- Otro aspecto, es la defensa de los Derechos Humanos de parte de los sectores populares, la mayoría con bajo nivel de escolaridad ¿Cómo popularizar la defensa de los Derechos Humanos cuando se da una violación de los Derechos? Trabajamos con el criterio que toda persona puede auto defender y defender los derechos humanos y para ello se trabajó sobre el “Uso Alternativo del Derecho” sobre la base de que la defensa de los Derechos Humanos no es propiedad de los profesionales del Derecho, sino de todos y cada uno, ayudando este planteamiento a la definición de los vínculos entre educación, denuncia y defensa y el papel protagónico que juegan los sectores todos y todas para hacer exigibles los Derechos Humanos.

La Carta: 4. ¿Tiene un consejo o recomendación para mejorar las prácticas de EP?

DL: La educación popular, como modalidad de educación no formal, parte de lo cotidiano como tema generador que induce a la reflexión y al análisis de la realidad para pasar a la acción. Debe ser siempre movilizadora. No se debe ser el centro del modelo y su estrategia; sino, el facilitador-a de procesos, lo que permite la apropiación por otros-as de su estrategia, se interiorice y se ponga en funcionamiento.

No desvincularse de las bases, de los sectores populares, ese contacto debe ser permanente, fortaleciéndonos mutuamente, intercambiando las experiencias entre los participantes. Cuando se conforme una RED, ésta debe ser una “red de base” “no una red de cúpulas”, una red que aglutine a todas aquellas personas que asuman la tarea, en nuestro caso, de promover los derechos humanos para la autodefensa, a la vez que denunciar violaciones y acompañar y defender a las víctimas. Una red pluralista, que sus integrantes provengan de una diversidad de espacios como organizaciones comunales, ONG’s, organizaciones gremiales, iglesias, instituciones y de la comunidad en general, involucrados en los procesos educativos, con carácter horizontal en donde se aprende colectivamente como participantes activos.

“¡DERECHO QUE NO SE DEFIENDE, ES DERECHO QUE SE PIERDE!”